Así, la primera equipación del Sevilla FC 22/23 muestra una trama que bebe directamente del Real Alcázar de Sevilla, mientras que la segunda luce unas barras horizontales en una clara inspiración y guiño a la espectacular iluminación nocturna del Sánchez-Pizjuán. La moda juega y desde Joma se señala que «hace años había más estampados. Ahora es más convencional, más sobrio y elegante. En tres años volverá a cambiar», dice Martínez, que pone ejemplos cercanos: «En el Villarreal el amarillo no se cambia ni por asomo. La familia Roig tiene claro que es su identidad corporativa, y como mucho se puede colocar un ribete azul marino en la manga o en el cuello. Y en el Getafe, Ángel Torres tiene claro que la primera equipación debe ser azul y la segunda, equipaciones futbol roja. En la tercera ya se puede cambiar».